Es un conjunto típico ancestral de nuestros caseríos, integrado por niñas adolescentes que generalmente visten de blanco con una blusa adornada con blondas y espejos pequeños y una falda plisada también de color blanco; llevan una corona de flores artificiales.
Cantan y bailan agitando un pañuelo blanco en cada mano al compás de violín, bombo, redoblante y travesera. Son acompañadas de un varón disfrazado de brujo que lleva una masha o zorrillo disecado o de un diablo (mandón). Luego de rendir su culto, cantan loas y versos especiales a las personas notables, en el frontis de sus casas.
¿Cómo recuperar el capital invertido tras la no clasificación al mundial?
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· José Luis Wakabayashi, director de la Maestría en Marketing de ESAN
Graduate School of Business, recomienda que, pese
Hace 2 horas.
:-)
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